jueves, 21 de agosto de 2008

lunas timidas

Se ríe mientras nos mira desde ahí arriba, granitos de sal en un mar de humo y neones, incapaces de subir para cubrirle el hombro o acabar de rasgarle el vestido...
Abajo, somos jugo añejo de uva en un entrechocar de barro que suma grados al calor y anuncia el aire que despeja el camino tras cada batalla... minúsculos, eternos en nuestra mortalidad